La presencia del caos en las calles de Santo Domingo es demasiado evidente.
Para vivirlo solo es suficiente abordar un vehículo o caminar de un lugar a otro.
Los vehículos mal estacionados son una realidad prácticamente invariable, pero con el discurrir de los días se acentúa con mayor intensidad en las vías públicas.
Se puede observar que los conductores hacen caso omiso de los letreros de “no estacione”, de las franjas amarillas en los contenes, de las aceras, y de otras disposiciones contenidas en la Ley.
Debemos hacer la salvedad desde el inicio, que fue imposible coordinar una entrevista con el director de Digesett, institución encargada de multar a los conductores que violan la ley de tránsito.
Reiteramos que solicitamos una entrevista al director de la Amet desde el miércoles, pero fue imposible concertarla ya que dijo textualmente “tengo mil cosas, pero mándeme las preguntas por escrito y se las respondemos.”
Nuestra intención era también hacer el recorrido por las calles con el General Francisco Osoria de la Cruz.
Mientras que la población aguarda por la construcción de los anunciados parqueos del gobierno como medida para superar el caos en las calles de la capital, algunos expertos consideran que la construcción de estos estacionamientos no se puede ver como la única salida, y por el contrario, sugieren aplicar multas mayores.
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