SANTO DOMINGO, República Dominicana.- Haití, sumido en una crisis que ha provocado la renuncia del Primer Ministro, y que por no realizar elecciones congresuales, en menos de un mes enfrentará nuevos conflictos de disfuncionalidad del parlamento, también está a punto de conmemorar el quinto aniversario del terremoto que amenazó con borrar al país del mapa.
A unas semanas del 12 de enero, casi 100 mil personas continúan viviendo bajo las carpas en condiciones inhumanas, mientras que la mayoría de las viviendas construidas por el gobierno en la localidad de Morne Cabrit permaneces deshabitadas.
Las razones se caen de la mata, según los propios damnificados y la sociedad civil, quienes aseguran que a pesar de que estas casas fueron fabricadas con fondos provenientes de la ayuda internacional, para beneficiarse hay que pagar al gobierno montos que sobrepasan su capacidad monetaria.
Lo preocupante es que las condiciones de estos damnificados pasa a un tercer plano debido a la situación política.
El mismo 12 de enero, que se cumplen los 5 años, también quedan sin parlamento. Las elecciones tienen 3 años de atraso.
Es por esto, que el gobierno ha decidido realizar los actos conmemorativos una semana antes, para evitar que coincidan con las protestas que se avecinan.
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