HAITÍ.- Sumido en escombros, atacado por la epidemia del cólera y agonizando por la incesante miseria, Haití, s embarca en un proceso electoral, cuyo costo alcanzó 29 millones de dólares, donados por la comunidad internacional.
Los favoritos a la presidencia, según las encuestas, Jude Celestín, el cantante popular Michel Martelly y la ex primera dama Myrland Manigat.
Este miércoles se emitirá el primer boletín y de nadie alcanzar el 50 más uno, tendrían que volver a votar el próximo 16 de enero.
Pero este proceso electivo fue arropado por una lluvia de incidentes, esto a pesar de que la policía se tiró a las calles desde tempranas horas.
Enérgicos los ciudadanos salen a las calles, más y más gente se une al recorrido, la inconformidad aparenta ser colectiva.
Que se anulen los comicios es el pedido de la multitud.
Muchos descargan su ira sobre la propaganda del candidato oficialista, Jude Celestín, acusado de hacer trampa en el escrutinio.
Hasta al actual presidente de Haití lleva lo suyo.
Separados por la contienda, pero unidos por un propósito, revocar las elecciones, los candidatos a la presidencia por partidos de la oposición, Michel Martelly y Charles Baker.
El artista Waiklef también se agregó a la manifestación.
Convocada la tarde del domingo, por 12 de los 18 aspirantes a presidir el país más pobre de América Latina.
La postulada por el Partido Independiente, Anne Bijou, explica las razones del llamado durante la rueda de prensa.
Sumidos en el patriotismo, algunos interpretan el himno nacional haitiano. Son los mismos que minutos más tarde vociferan la frase arresten a Preval, estamos cansados.
Pero la misma noche del domingo, el pedido fue rechazado oficialmente, el director del centro electoral provisional califica de buenos y validos los comicios 2010, garantizando que de sus resultados se derivarán los nombres del nuevo presidente, 11 senadores y 99 diputados.
Pasada las ocho de la noche del domingo, cualquier rumor de invalidación queda descartado.
Los altercados, protestas y denuncias de irregularidades fueron calificados por el tribunal electoral como hechos normales dentro de un país democrático.
Sin embargo, las denuncias de fraude rondaban desde las primeras horas del domingo.
El revuelo aumenta cuando a las 12 del mediodía, las boletas no habían llegado a algunos centros de votación, el reloj seguía corriendo y el proceso previsto a terminar a las seis de la tarde.
Quienes no perdieron tiempo para protestar fueron miembros de partidos opositores, denunciaron que en las mesas sólo le permitían el paso a los delegados de del partido de gobierno.
La confusión arropó a los que una y otra vez se buscaban en el padrón, sin obtener resultados.
Este inconveniente para muchos incrementó la abstención en las urnas, por ejemplo, en el colegio electoral ubicado en el refugio Park Jean Marie Vicent, en Puerto Príncipe, de 36 mil personas actas para sufragar, sólo lo hicieron unas 300.
Pero dicha agresividad se expandió por 56 de los 1500 centros de votación, según el informe oficial.
Un muerto en Jacmel y en Tabat, Cafufé y Petiguaf la violencia también se hizo presente, en tanto que en Juana Méndez, la atención se centraba en la supuesta aparición de boletas falsas.
Sin embargo, los medios locales resaltaron que el chofer del vehículo, supuestamente fue apresado.
También transcendió que algunos intentaron votar con cédulas de personas que habían fallecido en el terremoto del 12 de enero.
Pero el lío con las cédulas de identidad inició 24 horas antes de celebrarse los comicios.
El desorden predominó durante el sábado 27 de noviembre, muchos dejaron para última hora la búsqueda del documento que le permitiría votar.
Las comisarías policiales, centros electorales y oficinas públicas suministraban el plástico.
La ONU y la comunidad internacional expresaron hoy su “viva preocupación tras las numerosas incidencias” registradas este domingo durante los comicios presidenciales y legislativas en Haití.
Los incidentes, mayormente denuncias de fraude e irregularidades, provocaron que dos tercios de los 19 aspirantes a la Presidencia solicitaran la anulación de las elecciones.
Al expresar su preocupación por los incidentes registrados en Haití, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, indico que “desea la resolución de la crisis política en el país, exhortando al pueblo haitiano y a todos los actores políticos a la calma, ya que un deterioro de la situación de seguridad tendría consecuencias inmediatas en los esfuerzos para contener la epidemia de cólera”.
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